Ahora que nos adentramos en la segunda década del sigle XXI da la impresión de que el tatuaje, el percing y las dilataciones eran únicamente una etapa previa de lo que está por venir en un futuro próximo: la popularización del bodymorphing o modificación corporal.
A nuestro centro de Andrología (sobre todo en Madrid) están llegando ya chicos jóvenes que, con total naturalidad, presentan un tipo concreto de modificación corporal que está ganando adeptos en Europa estos últimos años: la moda del pearling o genital beading. Se trata de un implante subcutáneo, con forma de bolita comúnmente, pero tomando otras formas como estrellas, logotipos de marcas o símbolos conocidos, que tiene fines estéticos e incluso, se asegura, placenteros.
El genital pearling es una moda no exenta de polémicas y controversias en la esfera médica (en este caso Andrología y la Urología) por sus posibles riesgos y complicaciones. Nosotros intentaremos abordarlo lo más neutral posible, más en el terreno de la información que del alarmismo. Y es que, ya que los jóvenes van a practicarlo, mejor no “demonizarlo” de entrada e informar para fomentar la prevención.
Si piensas en iniciarte en el pearling este 2023, este artículo puede servirte como guía de “qué hacer y qué no hacer desde el punto de vista médico”, ya que lo redactamos en base a documentos científicos y evidencia actualizada a nivel internacional.
¿Qué es el pearling o genital beading?: cada vez más popular en España
El rebordeado o perlado genital, más conocidos por sus nombres en inglés pearling o genital beading, consiste en insertar pequeños trozos de material bajo la piel del pene (y por encima de los demás tejidos como músculo liso o cuerpo cavernoso, sin interferir con las venas o vasos sanguíneos importantes del miembro).
El objetivo que persiguen las personas que se someten a este bodymorphing son en principio estos dos:
- Resultar únicos, atractivos, transgresores o interesantes sexualmente para ellos mismos o sus posibles parejas sexuales (despertando curiosidad).
- Conseguir un “supuesto” aumento del placer sexual de la pareja durante el coito vaginal o anal (más abajo aclaramos porque ponemos supuesto entre comillas).
Origen del pearling: una vertiente de body-morphing importada de Asia
Esta práctica tiene un origen histórico muy peculiar. Se cree que se usaban en China a principios del siglo XIV y eran llamadas campanillas birmanas, teniendo un propósito ornamental y para aumentar la estimulación sexual.
Sin embargo, su verdadera popularización tiene que ver con los sindicatos del crimen organizado, los Yakuza de Japón, cuyos miembros son reconocidos por sus extensos tatuajes. En prisión, a través del genital beading, la Yakuza simboliza cada año de cárcel con una perla.
Y ahora, sin ninguno de estos motivos rituales de las sociedades asiáticas, se adentra como simple decoración en España y el resto de Europa.
Materiales, técnica y procedimientos
En la práctica del perlaje genital se suelen insertar de forma permanente pequeñas perlas de diversos tamaños y materiales bajo la piel de los genitales externos, en el caso del hombre, en el área subdérmica del pene.
- Silicona: Son el material preferido para este piercing, ya que no sólo son inertes, sino ligeramente blandas y, por tanto, un poco más tolerantes durante la actividad sexual.
- Acero inoxidable y titanio: Debido a su dureza, estas suelen usarse con menos frecuencia.
- Plástico o nylon: Mas usadas de forma artesanal y en prisiones.
- Otros metales.
Existen dos procedimientos comunes: uno muy similar a un piercing en el frenillo (en este caso, las bolas se sellan completamente bajo la piel sin dejar extremos sobresalientes) y otro similar a la inserción de un implante subdérmico, que requiere más conocimientos médicos y herramientas especializadas.
Para retirarlas, se aprieta la piel genital para que quede tensa sobre la perla. Se hace un pequeño orificio con una aguja y luego se extrae la bolita, de forma análoga a cuando se aprieta un grano. Tras la extracción, apenas quedan rastros o cicatrices de la modificación original.
En caso de que decidas hacerlo, algo a lo que no te animamos, te recomendamos que lo hagas en un centro con reputación y experiencia demostrable, ya que al menos este punto te garantiza unos estándares mínimos de seguridad e higiene...
¿En qué partes del pene se hace el genital beading?
En la literatura médico-legal, al genital beading se le conoce como nódulos peneanos La colocación variará en función de los resultados deseados. Cuando el propósito del pearling es el de potenciar las sensaciones y la estimulación sexual al usuario o a su pareja, los “expertos” en esta materia recomiendan colocar las bolitas más cerca del glande, pero pueden colocarse en cualquier parte del cuerpo del pene.
En cuanto a las formas de las perlas, las redondas se consideran mejores si lo que se busca es mayor estimulación, porque son más altas, mientras que las formas planas son más bien un añadido estético. En una búsqueda en Google hemos visto cosas tan dispares como el logtipo de NIke o la cara de Bob esponja. La cantidad de perlas que pueden insertarse depende de la superficie del cuerpo del pene y el deseo del hombre.
Cuidados y consideraciones a tener en cuenta en el perlaje del pene
Gracias a la buena irrigación que tiene el área genital, los orificios iniciales del pearling cicatrizan rápidamente, normalmente en los primeros días, pero las perlas tardan un poco en “fijarse” bajo la piel y ser encapsuladas por tejido nuevo.
Al terminar el procedimiento se suele usar un vendaje impermeable en la zona para proteger la cicatrización del tejido. Este vendaje se deberá dejar puesto durante tres días, y luego retirarlo en la ducha.
Durante la primera semana, es normal experimentar un poco de sangrado, dolor e hinchazón. En los siguientes 15 días luego del procedimiento, debe evitarse cualquier actividad que ejerza presión sobre la zona del piercing. Esto incluye:
- Uso de dispositivos genitales como extensores de pene o bombas de vacío
- Sexo con penetración
- Masturbación
¿El genital beading es seguro? hablemos de los posibles riesgos
Cualquiera de los dos procedimientos es relativamente “simple”, con unos riesgos y una cicatrización muy parecidos a los de un implante subdérmico en cualquier otra parte del cuerpo, aunque, como ocurre con muchos piercings genitales, el generoso flujo sanguíneo que llega a los genitales puede reducir considerablemente los tiempos de cicatrización.
La inflamación es muy común, durante y después de la cicatrización, aunque una cicatrización cuidadosa puede minimizarla. El rechazo es poco frecuente, pero puede producirse.
De hecho, en un documento publicado recientemente en la prestigiosa revista científica Urology, expertos clínicos de la Universidad de Palermo, describen el caso de un hombre de 35 años en el que evidencian la extrusión espontánea de una perla esférica de plástico.
Pero esto no debe ser una razón de alarma, en este caso el que el beading fue realizado por el mismo individuo sin un procedimiento ni materiales adecuados. La ausencia de métodos de asepsia y el implante de un material no validado, precipitan el rechazo por parte del organismo.
En cuanto a sus bondades estimulantes para las parejas sexuales…entramos en un plano muy subjetivo. Habrá personas que encuentren ese “roce” diferente un aliciente y otras que directamente al primer contacto sientan una necesidad imperiosa de detener el coito.
Pero luego están los hechos objetivos: no es lo mismo un cuerpo extraño en un pene de 22 cm de largo y geneorsa circunferencia que en uno de 14cm y grosor “en la media”. Por supuesto, tambien influye el tipo de sexo. No es lo mismo recibir una penetración vaginal que anal, ya que en esta última la fricción suele ser más intentsa y delicada.
¿Se asocia el pearling genital con infecciones de transmisión sexual (ITS)?
Los autores de un paper publicado en la revista oficial de la Sociedad Internacional de Medicina Sexual (ISSM) realizaron un análisis de cuatro casos clínicos en personas con genital beading. La investigación comprobó una posible asociación entre las perlas y las ITS, debido a un no tan inesperado fenómeno colateral:
Aunque parece que los hombres no experimentan efectos secundarios graves tras la inserción, las perlas fijas del pene pueden provocar la rotura de los preservativos. Los hombres informaron de que el uso del preservativo era más difícil después de la implantación, ya que era muy complicado que se ajustara correctamente al pene.
En esta misma línea, un estudio de reciente publicación realizado por la Universidad de Barcelona demostró lo siguiente respecto al uso de piercing en el área genital:
Los piercings a nivel de la zona genital pueden asociarse a infecciones víricas. No es inhabitual encontrar manifestaciones cutáneas de infección por el VPH en los orificios provocados en el meato uretral o en otras zonas de los genitales externos.
Pearling genital y su posible asociación con el VIH
Se cree que la incompatibilidad del genital beading con el uso de preservativos, bien sea por que puede romperse o porque su colocación resulta difícil, se asocia con un mayor riesgo de contraer VIH, que no dea de ser una ITS como otra cualquiera. Esto es motivo suficiente este para que desde Andromedi desaconsejemos su uso.
Un estudio realizado en Taiwán, reveló una asociación estadística entre el pearling genital y la seropositividad al VIH. Los autores sugieren que el hecho de tener esferas debajo de la piel del pene puede disuadir el uso de preservativos, ya que las perlas fijas provocarían relaciones sexuales dolorosas y podrían causar abrasiones en los órganos genitales.
Además, los usuarios de drogas parenterales que también practicaban el genital beading tenían un mayor riesgo de contraer enfermedades de transmisión sexual, incluido el VIH, al compartir los instrumentos utilizados para la inserción y las fugas del preservativo.
Otro estudio demostró que hasta el 96,6% de los portadores de perlas no habían sufrido complicaciones en los 8 años posteriores a la implantación. Además, los hombres seropositivos admitieron usar el preservativo durante las relaciones sexuales tras conocer su estado serológico para frenar la propagación del VIH.
Otras posibles complicaciones del genital beading y otros artefactos genitales
De acuerdo a esta misma investigación en la que también participó el departamento de Dermatología del Hospital Clínic de Barcelona, otras complicaciones asociadas al uso de estos artefactos en zona genital, son los siguientes:
- Sangrados e infecciones localizadas.
- Interrupción del flujo urinario, incidencia negativa en la erección y parafimosis, en aquellos varones que no están circuncidados.
- Los anillos en el pene también pueden causar ingurgitación y priapismo, que requieren tratamiento de urgencia para preservar la función eréctil.
- Introducción de materiales no homologados que puedan generar problemas graves de salud, o mala praxis en la colocació de los mismos. Esto es algo que no suele darse tanto en Europa, sino en paises en vías de desarollo, donde estas prácticas se hacen incluso a pie de calle y no en salones de tatuaje o enfermería donde habitualmente se hacen piercings bajo unas condiciones de salubridad mínimas
Conclusiones: no recomendamos su uso, pero…
Las pruebas y evidencia científica actualmente disponible (2023) en cuanto a las ventajas y riesgos del genital beading es francamente limitada. Se necesitan más investigaciones y datos actualizados para confirmar los resultados contradictorios y revelar el mecanismo entre el pearling, el uso del preservativo y las ITS.
Por supuesto que en nuestros centros Andromedi de Madrid, Sevilla, Marbella y Tenerife, NO ofrecemos este servicio, y en vista de sus posibles complicaciones y relativa asociación con infecciones de transmisión sexual como el VPH y el VIH, también desaconsejamos su práctica.
En caso de que decidas hacerlo, te recomendamos que lo hagas en un centro con reputación y experiencia demostrable, ya que al menos este punto te garantiza unos estándares mínimos de seguridad e higiene, sobre todo, teniendo conciencia de sus beneficios y sus riesgos.
Referencias médicas y Bibliografía
- Vella M, Abrate A, Zerbo S, Lanzarone A, Pavone C, Simonato A. Spontaneous extrusion of male genital pearling. Urol Case Rep [Internet]. 23 de mayo de 2021 [citado 14 de diciembre de 2022];38:101728. Urol Case Rep
- Stankov O, Ivanovski O, Popov Z. Artificial penile bodies-from kama sutra to modern times. J Sex Med. junio de 2009;6(6):1543-8. J Sex Med
- Grimalt, Ramon & Andres Lopez, Blanca. (2010). DERMATOLOGICAL COMPLICATIONS OF TATTOOS AND PIERCINGS. Monogr Dermatol 2010; 23: 55-66. 23. 55-66. J Sex Med
- Hsien Lee TS. Penile bead implantation in relation to hiv infection in male heroin users in taiwan. J AIDS Clinic Res [Internet]. 2012 [citado 14 de diciembre de 2022];01(S1). J AIDS Clinic Res
BLOG ANDROMEDI
Otros artículos que te pueden interesar
Prepucio inflamado, irritado, enrojecido o agrietado
5 abril 2024
